Tantas veces podemos comprobar que una imagen vale más que mil palabras. El sentido del fútbol, que está a años luz del “business”, del marketing, el racismo y sobretodo de los episodios de violencia dentro y fuera de los estadios, se refleja en una fotografía en blanco y negro que llega desde España.

El fútbol es tan sólo un juego, y esto es lo que nos recuerda un chiquillo de 5 años, Alejandro Rodriguez Macías. Alejandro juega en el Union Vera, de las Las Palmas de Gran Canaria, y en un partido recientemente tuvo que poner paz entre el árbitro y el entrenador del equipo contrario.

Los dos adultos aparecen uno frente al otro a poca distancia, con una actitud agresiva y enzarzados en lo que parecía una tensa discusión a pesar de que tan sólo se trataba de un partido entre niños y Alejandro trataba con los brazos abiertos de separarlos.

“Había comenzado una pelea entre el árbitro y el entrenador”, dijo Alejandro. Entonces me puse entre los dos y dije: “Paren señores”, y se alejaron cada uno por su lado. “Yo solo quería jugar al fútbol”, ha dicho el pequeño futbolista.

Juan, su padre, estaba realmente orgulloso: Ha sido una cosa que él ha hecho en un momento de tensión entre el árbitro y el entrenador, pero es un gesto que no había visto antes y lo ha hecho espontáneamente por completo. Ha sido muy valiente y todos han aplaudido lo que ha hecho. Estoy muy orgulloso de él.

Un bonito gesto capturado por la cámara de uno de los padres que estaba en la grada del campo, y que sin duda ha dado la vuelta al mundo.