El 1 y 2 de junio de 2014, se reunieron en el Estadio Olímpico de Roma más de cincuenta mil personas para la convocatoria especial del movimiento Rinnovamento nello Spirito, que contó con la participación del papa Francisco. Al recordar su experiencia con la Renovación en Argentina, el Papa habló de sus recuerdos personales diciendo: “¡Gracias! ¡Me he sentido en casa!”. Después de haber dicho a la Renovación del mundo entero “lo que espera el Papa”, invitó a todos “los carismáticos del mundo” a celebrar la fiesta de Pentecostés en 2017 (50º aniversario del nacimiento de esta “corriente de gracia”) en la plaza de San Pedro.
El evento estuvo organizado por el Rinnovamento nello Spirito, por el International Catholic Charismatic Renewal Services (ICCRS) y la Catholic Fraternity of Charismatic Covenant Communities and Fellowships. Para la ocasión, el cardenal Stanisław Ryłko presidió la celebración eucarística el 1 de junio, que precedió al momento en el que el Santo Padre habría llegado al estadio, para pasar hora y media con la numerosa asamblea.
Al saludar a los presentes, el cardenal Ryłko habló de un “evento de verdad histórico”, del “testimonio estupendo de comunión eclesial” y del “magnífico icono de la Iglesia”, reconociendo en su homilía que, gracias a la Renovación carismática, “multitudes de personas, hombres y mujeres, jóvenes y adultos en todos los continentes (¡y son millones!) […] han descubierto la grandeza y belleza de su propia vocación como personas humanas y como cristianos, convirtiéndose así en testigos dignos de crédito”.
